La pandemia producida por la COVID-19 nos encuentra un año más, este 1° de mayo, en alerta. La situación social, económica y epidemiológica no es la misma en esta segunda ola, hallándose más agravada como consecuencia de la pandemia. Asimismo, los grupos concentrados de poder, los medios masivos de comunicación y las operaciones políticas de los sectores que tras cuatro años de haber desarrollado políticas de ajuste y endeudamiento, hoy presionan para no avanzar con las medidas de cuidado, que pdorán luego redundar en el crecimiento del país.

Lxs trabajadorxs, en cambio, tenemos la esperanza puesta en nuestro trabajo conjunto, en el Plan de vacunación que avanza y por sobre todo, en nuestro pueblo solidario. Así tenemos la mitad de la batalla ganada; y la otra mitad, la pone la ciencia y un Estado Presente.

Cuidarnos y cuidar al otro, es la consigna; lo sabemos hacer y lo haremos más allá de los antipueblo. En esa ganamos, no será la primera vez. Hoy sabemos que el virus no perdona, y mata.

En el ámbito educativo, volvimos a las clases presenciales con las necesarias medidas de distanciamiento físico dispuestas para minimizar la expansión de los contagios, y con un porcentaje de docentes vacunadxs, siempre preservando y defendiendo la vida y salud de lxs trabajadorxs de la comunidad educativa.

En una sociedad empobrecida y precarizada, una vez más, las decisiones del actual gobierno nacional, orientadas a la protección de la salud de la población y del sistema sanitario, así como de atender la situación de emergencia de los sectores más vulnerables, deben poder profundizar su sentido transformador para evitar más sufrimientos y violencias para nuestro pueblo. Este compromiso es lo que lxs Docentes ponemos en práctica cotidianamente desde la Escuela Pública junto a nuestrxs estudiantes y las comunidades educativas, y junto al resto de lxs trabajadorxs del país desde cada espacio laboral. 

Hoy el principal valor a sostener es la defensa de la vida y de la salud, y para conseguirlo, la mejor acción es la unidad y la organización solidaria y colectiva. Por ello, en este 1° de Mayo, como trabajadorxs y sindicalistas, al amparo de un contexto cada vez más complejo, desde UTELPa reafirmamos nuestra voluntad de seguir luchando por la igualdad y la justicia social; así como pedimos por mayor protección  y  fortalecimiento en las medidas de cuidado para seguir preservando la salud de lxs trabajadorxs, cuidar los puestos laborales y avanzar con las campañas de vacunación.

¡Feliz día a cada trabajador y trabajadora en este día!